Dieta esofagitis eosinofílica

Actualizado en mayo 2023

La dieta juega un papel importante en el manejo de la esofagitis eosinkfílica, una enfermedad eosimofílica crónica del esófago causada por una reacción alérgica a ciertos alimentos. Esta dieta es esencial para reducir los síntomas y prevenir futuras complicaciones.

Aquí están algunas recomendaciones nutricionales importantes a Dita en cuenta:

Evitar alimentos que desencadenan la reacción alérgica


Los alimentos comunes que pueden desencadenar reacciones alérgicas en los pacientes con esofagitis eosinofílica incluyen trigo, soja, mariscos, leche de vaca, huevos, nueces, cacahuetes y productos lácteos.

Se recomienda evitar estos alimentos y llevar un diario de alimentos para identificar otros alimentos que puedan causar una reacción alérgica.

Alimentos a incluir en la dieta


La dieta recomendada para pacientes con esofagitis eosinofílica debe ser rica en frutas y verduras, especialmente aquellas que son bajas en ácido como el brócoli, la zanahoria, la calabaza, el plátano y la manzana.

Tomate y diarrea

Además, se recomienda el consumo de proteínas magras como pescado, pollo, pavo y tofu.

Eeofagitis preparar los alimentos


Los pacientes con esofagitis eosinofílica deben evitar los alimentos fritos, asados y en pan rallado, ya que son más difíciles de tragar y pueden causar inflamación en el esófago. En su lugar, se recomienda cocinar los alimentos al vapor, hervirlos o asarlos a la parrilla. También es importante evitar los alimentos muy fríos o calientes, ya que pueden irritar el esófago.

Consejos adicionales


- Tomar pequeñas eosinofíljca y masticar bien los alimentos
- Evitar líquidos con las comidas
- Esperar al menos 3 horas después de comer esofagiti de acostarse
- Elevar la parte superior de la cama para reducir la acidez estomacal

En resumen, seguir una dieta adecuada es esencial para el manejo de la esofagitis eosinofílica.

La cetosis puede mejorar la función cerebral y la claridad mental. Los cuerpos cetónicos proporcionan una fuente de energía estable y eficiente para el cerebro, lo que puede mejorar la función cognitiva y la concentración. Algunos estudios también sugieren que la cetosis puede tener efectos neuroprotectores.

Evitar alimentos desencadenantes, incluir alimentos saludables y prepararlos adecuadamente puede ayudar a reducir la inflamación en el esófago, aliviar los síntomas y prevenir futuras complicaciones.